Alrededor de 200 millones de personas en todo el mundo han sido diagnosticadas en algún momento de sus vidas con Incontinencia Urinaria; de ellas, cerca del 70% de la población -¡son mujeres! Una condición que puede clasificarse entre leve, moderada o abundante, según cada caso; pero aun así, que tiene diferentes tratamientos y posibilidades para contrarrestar, o bien, aprender a vivir con ella, y mejorar la calidad de vida de quienes la padecen. ¡Hablemos de Incontinencia Urinaria en mujeres y por qué debés aprender a identificar las señales!
¿Qué es la incontinencia?
Como su nombre nos lo indica, la incontinencia se refiere a la pérdida del control de la vejiga y, por ende, se dan algunas fugas de orina que -en un principio- se determinarán como leves y será sumamente importantes la opinión de un especialista para proceder con un diagnóstico oportuno que permita hacer frente a los primeros síntomas.
Aunque puede aparecer en cualquier momento de nuestras vidas, se trata de una enfermedad más frecuente en mujeres de 40 a 45 años de edad. Por eso, cada vez es más importante que acudás a tus controles médicos para asegurarte de que todo esté en orden o ¡que puedas resolverlo a tiempo!
La micción: ¿Cómo funciona?
Para entender cómo funciona la micción debés conocer las tres fases principales:
El llenado, que es cuando se produce la orina y baja desde los riñones hasta la vejiga por medio de los uréteres. Las paredes de la vejiga se relajan y además, se van dilatando para poder acumular la orina. Según un estudio de la Escuela de Medicina Stanford, si sos un adulto sano podes llegar a acumular en un promedio de dos a cinco horas, 2 tazas de orina, aproximadamente.
El almacenamiento, el cual se da en un proceso interconectado entre la vejiga, los músculos del suelo pélvico y el sistema nervioso.
El vaciado, en el cual se emiten las señales al cerebro que dará la orden para que vayas al baño. Lo que pasa acá es que las paredes de la vejiga se contraen y los músculos se relajan, abriendo paso a través de la uretra para eliminar la orina.
Cuando una mujer padece incontinencia urinaria quiere decir que hay algo que está ocurriendo como no debería en el proceso de la micción. Si querés conocer cuáles son las causas principales, ¡seguí leyendo!
Incontinencia urinaria en mujeres: más común de lo que imaginás
Cerca de 4 o más, de 10 mujeres mayores de 65 años han sido diagnosticadas con incontinencia, así que si pensás que es algo atípico, o que sólo podría pasarte a vos, la verdad es que la incontinencia urinaria en mujeres ¡es más común de lo que imaginás! pero no te preocupés - ya hablaremos de sus tratamientos.
¿Por qué la incontinencia urinaria afecta a más mujeres que hombres?
Varias de las causas por las que una mujer podría presentar incontinencia urinaria o bien, algún trastorno de la micción, están relacionados con el sistema reproductor femenino y algunas situaciones particulares como el embarazo, el posparto -que podría generar un prolapso- y la menopausia.
Por ejemplo, en esta última, como la producción de estrógenos disminuye, los músculos que tienen como tarea sostener la vejiga y la uretra, comienzan a debilitarse y por esa razón se producen las fugas de orina.
Tipos de incontinencia urinaria en mujeres
Las situaciones, así como los síntomas pueden variar y determinar diferentes tipos de incontinencia urinaria, los cuales más comunes -en el caso de las mujeres- son:
Incontinencia urinaria de esfuerzo
Para descubrir si tenés este tipo de incontinencia, ¡las señales serán claras! Se produce cuando al ejercer una presión sobre la vejiga, hay pérdida involuntaria de orina, por ejemplo: si tosés o estornudás demasiado fuerte, al reírte o levantar algún objeto pesado. Su causa es principalmente por el debilitamiento de los músculos del suelo pélvico o los músculos del esfínter.
Incontinencia urinaria de urgencia
También se conoce como “vejiga hiperactiva”. Este tipo de incontinencia se da cuando sin esperarlo se presenta una necesidad urgente de orinar, en la que -a veces- desafortunadamente no alcanzás a llegar al baño. Puede estar relacionada con alguna infección en las vías urinarias o un trastorno neurológico y, a menudo, es más común en mujeres mayores.
Incontinencia urinaria mixta
En esta podés llegar a compartir algunos síntomas de la incontinencia urinaria por esfuerzo y de urgencia. Entre el 30% y 40% de las mujeres con Incontinencia Urinaria (IU), presentan esta afección.
Incontinencia urinaria por rebosamiento
Aunque esta es más común en hombre, también puede presentarse en mujeres. Se trata de una vejiga extremadamente llena que no alcanza a vaciarse completamente y la orina empezará a gotear constantemente por dicho nivel de almacenamiento. Podés experimentar Incontinencia Urinaria por rebosamiento por causa de una obstrucción en las vías urinarias, o por agrandamiento de la próstata.
Causas comunes de la incontinencia urinaria femenina
¡Toma nota que esto te va a interesar! Una mujer puede presentar signos de incontinencia urinaria cuando:
En el embarazo los cambios hormonales y el peso del bebé, generan presión en la vejiga y por ende, se reduce la capacidad para retenerla.
Después del parto, se debilitan los músculos del suelo pélvico y pierden control sobre la vejiga, la uretra y otros órganos pélvicos.
En la menopausia o con el envejecimiento, debido a la pérdida de estrógenos, podés evidenciar mayor debilitamiento en algunos de tus tejidos vaginales o uretrales.
Hay sobrepeso u obesidad, al generarse mayor presión sobre la vejiga.
Se presentan afecciones neurológicas. Pues ante el diagnóstico de esclerosis múltiple o una lesión en la médula espinal ¡debés estar informada!
Diagnóstico de la incontinencia urinaria femenina
Hay diferentes formas para diagnosticar si tenés o no incontinencia urinaria. Lo primero y lo más importante es que debés estar alerta a cualquier síntoma inusual relacionado con dolor en la zona pélvica o fugas de orina, sean leves o moderadas. Después de tomar la decisión de ir al médico, este podrá pedirte un análisis clínico completo; algunos detalles sobre cuándo, cómo, cantidad y con qué frecuencia se dan tus micciones, además de exámenes pélvicos, de sangre, tomografías o ecografías, según cada caso.
Tratamiento de la incontinencia urinaria femenina
El especialista podrá recomendarte algunos tratamientos relacionados con cambios en el estilo de vida, así como -según el grado de incontinencia- otras alternativas médicas o quirúrgicas que ayudarán a contrarrestar la afección.
Entre los hábitos más comunes estarán mantener un peso corporal equilibrado, dejar de fumar -si lo hacés-, moverte y activarte físicamente, así como controlar la ingesta de líquidos en el día.
En cuanto a tratamientos o procedimientos médicos, podés encontrar:
Medicamentos que ayudarán a reducir la urgencia y frecuencia urinaria.
Dispositivos como el catéter o sonda que ayudará a drenar la orina. También están los anillos o pesarios, que retienen la vejiga. El médico te dirá cuántas veces al día debes hacer uso de éstos, o si son permanentes.
Cirugía, cuando los tratamientos anteriores no son efectivos, el profesional de la salud podrá recomendarle algunas cirugías ante posibles prolapsos como la colocación de una malla que permite reparar y sostener los tejidos debilitados.
Prevención de la incontinencia urinaria femenina
¿Si podés prevenirla? ¡Claro que sí! Si bien, en ningún momento estarás exenta de presentar incontinencia urinaria, algunas acciones pueden reducir la posibilidad de contraerla, por ejemplo, si mantienes un peso adecuada, si te ejercitas con frecuencia, si limitas el consumo de algunas bebidas como el café y el alcohol, y si además, evitas fumar y mantienes una buena higiene íntima, de seguro, le estarás bloqueado la puerta a la incontinencia.
Hacer ejercicios de Kegel: ¿Para qué?
Los ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico, también conocidos como ejercicios de Kegel, son útiles tanto en el tratamiento como en la prevención de la incontinencia urinaria en mujeres. Estos te ayudarán a fortalecer los músculos que sostienen la vejiga y los órganos pélvicos y por ende, se mejora la capacidad de retención de la orina especialmente en casos de incontinencia urinaria por esfuerzo o urgencia.
Son muy recomendados para mujeres en embarazo o en su etapa posparto.
Además, cuentan con muchos beneficios para mejorar la experiencia en las relaciones sexuales.
¿Cuándo debes consultar a un médico?
No es un secreto que hablar de incontinencia resulte ser algo vergonzoso para vos, pero la verdad es que sin un profesional que pueda asesorarte en el tratamiento, el proceso será más complicado. Así que, ¡no te lo guardés para vos sola! Asistir al especialista desde el primer momento en el que tengás una advertencia, será clave para encontrar la mejor solución, según tu caso. La incontinencia no debe ser un impedimento para llevar una vida normal, entonces cuando sintás que está afectando tu manera de relacionarte contigo y los demás: es porque necesitás -sin duda- acompañamiento.
Desde la Academia TENA estamos aquí para vos. ¡Mantenerte informada es el primer paso para prevenir cualquier afección futura!
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